viernes, 31 de julio de 2009

Empatía



Empatía

El término “empatía” significa, principalmente, compasión, condolencia, comprensión, asimilación, etc. Normalmente, lo usamos cuando queremos indicar que somos capaces de ponernos en los zapatos de otra persona y comprender cómo se siente esa persona.

¿Podemos mostrar o sentir empatía, incluso si no hemos tenido una experiencia similar a la de la otra persona? Algunos creen que sí, otros opinan que no. Para algunas personas, sentir empatía es algo natural, porque quizás, son más sensibles a las necesidades emocionales de los demás. Pero, para otras personas, es más difícil llegar a comprender cómo se siente otro ser humano, si no han tenido una experiencia similar.

Personalmente, creo que no hay una respuesta correcta o incorrecta con respecto a si necesitamos haber tenido una experiencia similar a la de otra persona para comprender cabalmente cómo se siente. Creo que el sentir es algo muy personal y que la empatía depende mucho de cómo es cada persona particular. Hay personas que han desarrollado esta habilidad más que otras, por ejemplo.

La percepción de la intensidad de lo que sentimos, también es muy particular. Al respecto, recuerdo que estando en una sala de emergencias y en una situación extremadamente grave, el médico me pidió que clasificara mi dolor en una escala del 1 al 10. A lo que le respondí: “¿Según la escala de quién?”. Debido a que yo tengo un alto nivel de tolerancia al dolor, para mí (según mi escala) ese dolor era de un nivel 5, mientras que para cualquier otra persona, con un nivel de tolerancia al dolor mucho menor, ese mismo dolor sería de un nivel 11. (Nota al margen - La razón por la cuál estaba en la sala de emergencias era porque tenía una peritonitis aguda y me operaron de urgencia, lo cuál salvó mi vida, literalmente).

A veces me pregunto si realmente podemos comprender con exactitud cómo se siente una persona. Según el grado de importancia que tengan las cosas para nosotros, un hecho desafortunado (como la pérdida del empleo, una ruptura sentimental, un desalojo, etc.) puede vivirse con diferentes grados de intensidad, que van a variar de una persona a otra. Si para mí, perder mi empleo es la peor tragedia que me puede ocurrir en la vida, cuando algún amigo o conocido pierda su empleo, yo pensaré que esa persona está terriblemente angustiada o deprimida, y quizás no sea así. Quizás, para esa persona, perder su empleo no es algo que viva como una tragedia. De modo, que podemos sentir empatía (compasión, consideración) pro los demás, pero es difícil precisar el grado o la intensidad de los sentimientos ajenos. Hay muchas variables en juego y por esta razón, es importante tener en cuenta que los sentimientos de cada individuo son muy personales. Podemos tener una idea de cómo se siente, pero nos resultará más difícil acertar con lujo de detalle, cómo se siente esa persona exactamente.

________________________________________________

www.abusoemocional.com @ Mariana Barrancos 2009
________________________________________________

No hay comentarios:

Publicar un comentario